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Las startups intentan ignorar la realidad y posponer el momento en el que su negocio debe cumplir las mismas reglas que los demás. En este artículo te cuento por qué siempre hemos apostado por crear un negocio y no una startup.
El término “startup” está en boca de todo el mundo los últimos años, sobre todo de los medios de comunicación especializados en tecnología y negocios.
En este artículo breve te cuento porque nosotros siempre hemos apostado, como muchos otros, por construir un negocio en lugar de una startup.
Vamos allá.
Un sitio mágico
La startup es un sitio mágico. Un lugar donde:
- Los gastos son problema de otros.
- Los pocos o nulos beneficios no son un problema de nadie.
Un sitio donde puedes gastar el dinero de otras personas hasta que encuentres un modo de generarlo por ti mismo, si hay suerte…
Un lugar donde las leyes de la física de los negocios, no se aplican.
¿Cuál es el problema?
El problema es que una startup es como un cuento de hadas que está alejado de la realidad.
La cruda verdad es que cualquier negocio está condicionado por las mismas leyes del mercado y por las mismas reglas de La Economía:
- Hay ingresos
- Hay gastos
Si consigues tener beneficios, sobrevives. Si no lo consigues, desapareces.
Las startups intentan ignorar esta realidad y posponer lo inevitable, el momento en el que su negocio debe cumplir las mismas reglas que los demás: crecer, dar beneficios y ser un negocio real y sostenible.
Cualquiera que adopta la actitud de “ya veremos como ganamos dinero en el futuro” está adoptando una actitud casi ridícula.
Esto no quiere decir que alguien con esta actitud este condenado al fracaso. Hay un pequeño porcentaje de personas que a pesar de ella, han conseguido construir negocios rentables. El problema es que la gran mayoría, por no decir todos, fracasan en el intento.
Construye un negocio real
Si piensas en emprender, huye del esquema de las startups del mismo modo que lo hicimos nosotros.
Es mucho mejor crear un negocio real.
Los negocios reales luchan con las circunstancias reales como las nóminas, los impuestos o las facturas desde el primer día.
Los negocios reales se preocupan por los beneficios desde el día de su fundación. No tratan de posponer lo inevitable.
Tampoco tratan de ocultar los problemas con la excusa de ser una startup.
Crea un negocio real y tendrás muchas más probabilidades de tener éxito. En FacturaDirecta, llevamos 8 años creciendo año tras año de forma sostenida gracias a esta idea.
Te animamos a hacer lo mismo.
¿Y qué más en el próximo artículo?
En el próximo artículo, te hablaré de cómo conseguir que tus precios persuadan y te ayuden a vender mucho más.
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Nos vemos pronto.
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