El inicio del curso escolar es uno de los momentos del año en el que nos planteamos cambios. Cambios que afectan directamente a nuestro modo de vivir.
Correré una maratón, iré al gimnasio, dejaré de fumar, me tomaré un poco más de tiempo libre, seré más productivo, no me preocuparé tanto, estaré más con mi familia y amigos, y un largo etcétera. Todos buenos y muy valiosos propósitos.
Pero querer aplicar todos estos buenos propósitos de la noche a la mañana, será tu perdición.
No puedes arreglarlo todo a la vez
Una de las cosas que perjudican más seriamente la productividad es querer hacer muchas tareas a la vez. El cerebro se satura y al final no consigues terminar ninguna de ellas.
Con los propósitos pasa algo similar. Si quieres tener éxito con tus buenos propósitos, no los ataques todos a la vez.
Un solo propósito y a fondo con él
Se trata simplemente de escoger uno de tus propósitos y ponerle una fecha límite cercana. Es decir, en lugar de decir “Voy a cumplir 3 propósitos durante este curso”, di “Voy a cumplir un propósito cada trimestre”.
De este modo centras tus esfuerzos en cumplir un único objetivo, un único propósito. El esfuerzo concentrado e intenso durante poco tiempo es muy efectivo.
Cuando hayas conseguido el primero de ellos, empieza con el segundo y así sucesivamente
No te hagas trampas, que nos conocemos...
Todos sabemos que el cerebro humano es especialista en hacerse trampas, es decir, en inventar excusas que justifiquen que un objetivo no se ha cumplido.
¿Cuántas veces has oído la frase “Es que no tuve tiempo de estudiar” después de un examen? ¿Muchas verdad?
Imagen de albertogp123
No puedes permitir que esto suceda con tu propósito. Tienes uno y debes cumplirlo. Coge lápiz y papel, y escribe cual es tu propósito y su fecha límite. Cuando escribes algo negro sobre blanco siempre gana importancia.
Habla con tus amigos y familiares, diles cual es tu propósito y en qué tiempo piensas cumplirlo, ellos te ayudaran. Además, contando tus planes estarás socializando tu propósito, y esto te obligará a tener un compromiso mucho más firme con él.
Conclusión
El principio de curso es un buen momento para pensar en buenos propósitos, pero no cometas el error de querer atacar muchos a la vez porque es muy probable que fracases en todos.
Es mucho mejor elegir uno y poner una fecha límite cercana, de este modo tus posibilidades de éxito crecerán.
Si tienes algún propósito para este nuevo curso, cuéntalo sin reparos en los comentarios. Quizá podamos ayudarte a conseguirlo! ;)