Conseguir los objetivos que te has propuesto es genial, ¿verdad?
Es como la calma después de la tempestad o aquel mítico momento del equipo A en el que Hannibal decía: “Me encanta que los planes salgan bien”. Es una gozada, la culminación de un trabajo bien hecho y de muchas horas de dedicación.
Pero hay algo mucho mejor que conseguir los objetivos, algo que a mi personalmente me motiva mucho más, muchísimo más que conseguir los objetivos:
Celebrar que los he conseguido.
En este artículo voy a intentar convencerte de que debes celebrar cada uno de los objetivos que consigas (quien avisa no es traidor….). Estos son los motivos.
La vida son 4 días
Y trabajas para ser feliz. No siempre hay motivos de celebración, más bien escasean, de modo que cuando consigues uno no puedes, de ningún modo, dejar que pase cómo si nada.
El horno no está para bollos hoy en día, así que debes celebrar tus éxitos siempre. Si has luchado para conseguir algo, y finalmente lo logras, mereces una celebración.
Más motivación y más productividad
Cuando me levanto cada mañana no pienso sólo en conseguir los objetivos que nos hemos marcado cómo empresa, o en los objetivos que me he marcado personalmente, pienso aún más en cómo los vamos a celebrar.
No se a ti, pero a mi pensar en la celebración me motiva mucho más que pensar sólo en conseguir los objetivos. Y si estoy más motivado, sin duda, soy más productivo.
Más cohesión de equipo
Hay otra gran ventaja de las celebraciones de equipo, celebrar los éxitos cohesiona.
Las experiencias compartidas ayudan a crear vínculos entre los distintos miembros del equipo y esto tiene indiscutibles ventajas en el ambiente, la confianza y el bienestar de todos los miembros.
Algo que, estarás conmigo, es muy importante.
No hace falta un gran presupuesto
Las celebraciones son aptas para todos los bolsillos. Celebrar algo no implica tener que gastar un dineral. Algo tan simple cómo una cerveza después del trabajo puede ser una celebración barata y efectiva.
Y esto se puede aplicar si tienes un pequeño equipo pero también si eres autónomo y trabajas sólo ante el peligro. La cuestión es no dejar de celebrar nada.
Si te faltan ideas, aquí tienes algunas:
Si tienes un equipo:
- Organiza una cena en un lugar especial.
- Organiza un viaje (aquí necesitas un poco más de presupuesto).
- Haz una camiseta commemorativa.
- Organiza escapada de fin de semana en una casa rural o un albergue.
- Organiza un vuelo en globo.
- Organiza un descenso de ráfting.
- …..
Si eres autónomo:
- Regálate un capricho.
- Sal un fin de semana
- Cómprate mejores herramientas de trabajo (un buen ordenador, un buen smartphone, unas buenas herramientas, .....)
- Disfruta de una buena cena.
- Cómprate el jamón o el vino que hace tiempo que tienes ojeado y compártelo con tu familia y amigos.
- Cómprate unos zapatos o un bolso espectacular.
- ….
Conclusión
El día a día es muy duro y a menudo no tenemos tiempo ni para celebrar los éxitos. Esto es un error de tamaño descomunal. Si celebras tus logros, estarás mucho más motivado y serás mucho, muchísimo más productivo.
¿Celebras tus objetivos conseguidos? ¿Nos cuentas cómo? Deja un comentario con tus experiencias, seguro que todos vamos a aprender. Ah, y comparte el artículo en redes sociales, así tendré un motivo más de celebración :)¡Gracias!