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Si eres autónomo sabes que conseguir clientes es muy duro y a menudo, sobre todo cuando empiezas, tienes la tentación de regalar tus servicios con la esperanza de conseguir más trabajo y algún cliente fiel.
Pero no cobrar tus servicios o tus productos es un error. Un error que yo he cometido, igual que muchos, y que debes evitar a toda costa. Estos son los motivos:
Si das algo gratis lo estás infravalorando
El precio define el valor de un servicio y forma parte de su descripción. Si el precio es cero, lo que estás diciendo en realidad es que tu servicio o producto no vale nada. Y cuando a un cliente le dices que tu servicio no vale nada, nunca va a estar dispuesto a pagar por él. Ni ahora ni en el futuro.
Además, por el mero hecho de no haberle cobrado, tu cliente puede considerar que tu servicio/producto no es profesional. Lo que puede tener como consecuencia que en lugar de pagarte a ti algún día, se vaya a buscar un profesional que le cobre por su trabajo cuando por fin decida gastarse el dinero.
Vas a trabajar mal
A nadie le gusta trabajar gratis, a ti tampoco.
Aunque tu trabajo te apasione, hay algunas tareas repetitivas y pesadas que hay que hacer. Si trabajas gratis, estas son las tareas que te van a hundir. La falta de presión cuando tus ingresos no dependen de tu trabajo, provoca una relajación inconsciente en tu mente. Una relajación que tendrá como consecuencia una peor calidad en tus servicios.
Tu cliente, aunque no pague, va a esperar el mismo servicio que si pagara. Y como esto no va a suceder (aunque tus intenciones sean buenas), dejarás una mala imagen y no volverá a confiar en ti nunca más.
Perjudicas a tu sector
Si todos tus compañeros de profesión empiezan a bajar sus precios o a regalar sus servicios, acabaréis todos cerrando las puertas.
Nadie quiere pagar un servicio que ha podido disfrutar gratis. Si tu regalas un servicio, impides que otro cobre para proveerlo. Nadie puede competir con un precio 0.
Estarás perjudicando tu trabajo y el de todos tus compañeros de profesión.
Un cliente que no quiere pagar NO te conviene
Necesitas cobrar tu trabajo para poder vivir. Así de simple y así de complicado a veces. Tu cliente debe entender esto igual que lo entiendes tu. Y si un cliente no lo entiende, lo siento: no te conviene. No va a ser nunca un buen cliente.
Aprovecha el tiempo para hacer algo más provechoso
Trabajar gratis te aporta muy poco. Hay otras manera de aprovechar tu tiempo mejor que regalando tus servicios a un cliente que no paga.
Puedes formarte más, conocer otros emprendedores que tienen más experiencia, visitar a tus posibles clientes para descubrir cuales son sus necesidades no cubiertas, escribir un blog para dar a conocer tu perfil, hacer surf o emprender algún proyecto personal, …..
Imagen: Dunedin NZ
Hay mil opciones mejores antes que trabajar gratis.
No te dejes impresionar por la falta de presupuesto
Lo más habitual cuando te reúnes con un cliente por primera vez es oír una frase del estilo “tenemos poco presupuesto” o “estamos pasando una mala racha”. No te dejes impresionar.
Ante este tipo de afirmaciones, no puedes regalar tus servicios. Debes convencer a tus clientes de que gracias ti, van a ganar más de lo que gastaran en pagarte.
Aunque ahora no tengan ni un solo euro, les vas a ser rentable.
Conclusión
Aunque sea complicado encontrar nuevos clientes, regalar tus servicios debe ser lo último que hagas.
Si lo haces, estarás infravalorando tu servicio, trabajarás mal, perjudicarás a todos los profesionales de tu sector, tendrás clientes que no te convienen y dejarás escapar la oportunidad de dedicar tu tiempo a algo mucho más provechoso.
Se muy firme con esto y cuenta a tus clientes porque no ofreces tus servicios gratis. Entenderán tus motivos y te respetaran mucho más como profesional.
¿Alguna vez has prestado servicios sin cobrar? ¿Lo haces aún? ¿Crees que sirve de algo? Comparte tu experiencia en los comentarios, nos interesa mucho.
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