¿Qué es lo que hace que alguien tenga éxito? ¿Qué hacen de especial las personas que lo consiguen?
Los que tienen pocas ganas de mejorar te responderán que las personas que tienen éxito no hacen nada especial, que se trata de suerte, de "enchufe" o de gente con un talento natural.
Pero la realidad es que no se trata de algo mágico, ni mucho menos de la suerte.
El motivo por el que algunas personas tienen éxito, es que han aprendido a adoptar pequeños hábitos que optimizan y monetizan su tiempo. En este artículo encontrarás diferentes métodos para conseguir introducir estos buenos hábitos en tu vida. Vamos allá.
1. Minimiza distracciones
Las distracciones pueden llegarte de muchas formas, especialmente si trabajas en casa: las lavadoras, tu familia, las redes sociales, tus amigos, algunos links interesantes... ¿Cómo las puedes evitar?
Pues teniendo un espacio privado para trabajar con una puerta cerrada si estás en casa o bien yendo a trabajar a un coworking, una biblioteca o una oficina propia. Todo el mundo debe saber que necesitas tiempo y tranquilidad para trabajar.
Si te gusta mucho Facebook, Reddit o Twitter, puedes bloquear las notificaciones para que no te distraigan de tu trabajo.
Y ojo con las distracciones disfrazadas de trabajo porque son las peores. El ejemplo más claro son los emails. Para evitar que te roben demasiado tiempo dales un horario. Responde sólo en unas determinadas horas del día.
2. Escoge bien las prioridades
Priorizar tareas es uno hábito esencial para cualquier emprendedor. Estos son algunos de los métodos que puedes aplicar para hacerlo:
El método ABCDE
Este método se basa en establecer correctamente las prioridades de tus tareas
Es muy sencillo, se trata de hacer un listado de tareas sin orden de prioridad. Luego clasificar estas tareas en estos grupos en función de su importancia:
- A – Tareas muy importantes.
- B – Tareas importantes.
- C – Tareas que seria bueno hacer.
- D – Tareas que se puede delegar.
- E – Tareas que se pueden eliminar.
Tan simple como esto. Te darás cuenta que el simple hecho de clasificarlas de este modo te ayuda a organizar tus tareas y a establecer prioridades.
La regla de Pareto
En el artículo "Mejora drásticamente tu negocio con el principio de Pareto" ya hablamos largo y tendido de como puedes usar la regla del 80/20 en tu pequeño negocio, pero siempre viene bien recordar qué dice.
Esta regla aplicada a los negocios, dice que el 80% de tus ingresos vienen del 20% de tus acciones.
Para identificar este 20% de acciones que te proporciona el 80% de tus ingresos, lo mejor que puedes hacer es dar un vistazo a tus mejores resultados y ver qué acciones los generaron.
De este modo vas a poder establecer estas acciones como hábitos en tu día a día, y esto te ayudará a conseguir el éxito.
La tarea más grande y pesada, la primera.
Si cada día empiezas con la tarea más grande y pesada que te toque realizar aquella jornada, el resto del día será mucho más llevadero y fácil. Dejar lo que requiere más esfuerzo para lo último, no es una buena idea.
3. Usa un sistema de gestión de tareas que te funcione
Los sistemas de gestión de tareas son básicos para cualquier emprendedor, pero cada uno debe encontrar el que mejor le funciona:
- Planificador físico: Es decir, una libreta, agenda,... que te ayude a focalizarte en los objetivos y tareas semanales.
- Aplicaciones para móviles: Hay múltiples aplicaciones para smartphones que te permiten organizar tus tareas diarias. Explora las distintas opciones, dales un tiempo y elige la que más se adapte a tus necesidades.
- Gestión de proyectos: Si trabajas por proyectos con una fecha límite, es muy probable que necesites un programa de gestión de proyectos como por ejemplo Basecamp o Asana que además te permiten colaborar con tu equipo.
4. Planifica tu día la noche anterior
Tómate un tiempo cada noche para planificar tu día siguiente. Usa tu sistema de gestión de tareas para decidir qué tareas harás el día siguiente y en qué orden.
De este modo empezarás el día con una foto clara de lo que debes hacer en aquella jornada de trabajo, en lugar de intentar planificar tu día cuando el cerebro te pide que vuelvas a la cama o que le des cafeína.
5. Delega las tareas no esenciales
No tienes que hacerlo todo. Tener a alguien que te ayude en las tareas menos importantes puede liberar tu agenda para dedicarte a las cosas realmente importantes.
No hace falta que sea un trabajador a tiempo completo, puedes contratar un freelance por ejemplo. Evidentemente tendrá un coste pero es muy probable que puedas compensarlo con las horas que te queden libres.
Además puedes usar un programa que simplifique y automatice tus tareas administrativas. En este caso FacturaDirecta es tu mejor opción ;)
6. Empieza a meditar
La mayoría de la gente se siente intimidada por esta palabra "Meditar". Focalizarte en tus pensamientos puede asustar, sobre todo al principio.
Afortunadamente no necesitas meditar durante 4 horas al día para empezar, concentrarte en tu respiración durante 5-10 minutos al día es suficiente.
Y si meditar no es lo tuyo, siempre puedes hacer algunos ejercicios de respiración que te ayuden a centrarte y focalizarte.
Conclusión
Puede que todos estos hábitos parezcan un caos, pero a medida que vayas incorporándolos en tu día a día, te darás cuenta de que tienen sentido en conjunto y que todos van en la misma dirección. ¡Úsalos para hacer crecer tu pequeño negocio!
¿Tienes algún otro hábito que te gustaría recomendar? Compártelo en los comentarios, seguro que tienes alguna arma secreta ;)